¿Cuanto hace de cuando puse las cartas sobre la mesa
Cuanto hace que toque la pelota para que empiece el partido
Cuanto hace que te entregue mi caja de propiedades
Cuanto hace que use mis palabras para hablarte
Cuanto hace.
Cuanto hace que vez lo que dice mi alma en mis ojos
Cuanto haces que alquilaste la suite de mi corazón
Cuanto hace que usas mi cuerpo como tuyo y te pones en mis zapatos
Cuanto hace que colgaste tu ropa en mi ropero y en el flaco perchero tu sombrero
Cuanto hace que mi boca solo pronuncia tu nombre
Cuanto hace que en mi cielo andas con tu velero
Cuanto hace que deje tus pies por la cumbre
Cuanto hace que bajaste a cero mi tan participativo olvido
Cuanto hace que encontré oraciones que no se me ocurren
Cuanto hace que manchaste con tus besos mi acolchado
Cuanto hace que trate de confundir el limón con el azufre
Cuanto hace que me hiciste un afortunado
Cuanto hace que trato de averiguar lo que te cubre
Cuanto hace que me tenes en tu puerto amarrado?

Acariciar con frecuencia y sin interrupciones, durante lo que dura el vuelco de un camión cisterna, a la linterna que le hizo señales de luces al sol para que este le tire un rayo ultra violeta como quien le arroja una lata de atún vacía a un delfín detective de moluscos, la pobre linterna lo agradecerá en su estadía en el Instituto del quemado mientras escucha un disco rayado de Violeta Rivas y vomita una cama solar cucheta. El sueño del bello durmiente (culipatín)Texto: Leonor / Fotografía: Le pipe

El informante sorno más films presenta: Bruma Thurman vs Lito Niebla.Estos dos personajes reencarnan uno en la bruma y el otro en la niebla, se baten a duelo para ver quien le tapa la visión y enceguece momentáneamente a los ciudadanos que anden con paraguas, para conducirlos hasta un pararrayos y que estos se electrocuten y reencarnen en sus filas, y así tener más soldados que luchen para seguir electrocutando en círculo vicioso, ella se destaca con su espada-esparrágo y él con su bigote lanza-corcheas calibre 22.

Cuando creemos ser lo que no somos..

Me miró (mientras gritaba ¡au!), me gruñó (y más ¡au!), se babeó (y su ¡au! seguía presente), me ladró (con más ¡au!), me mordió (con el ¡au! como grito victorioso), me masticó (más y más ¡au!), me tragó (el ¡au! acá sonó a goce), me defecó (seguido de otro ¡au!), me volvió a comer (un ¡au! pero con gesto de arcada), me vomitó (un ¡au! sufrido), después me lamió y se lo llevaron las fuerzas del orden, pero no le hicieron nada por haberme morfado, solo lo internaron porque le cayó mal mi ser convertido en popó, y el barbijo no tiene nada que ver con que es un asesino, es porque es fan de Michael Jackson.

¿Quién es?

Este hombre seguramente es popular, soberano, compañero, federal, no va a la rural, juega al pool con los peces gordos del campo (no con hipocampos), amigo de Saadi, redistribuidor, fanático de Cuba, tiene dólares que no son de él en Suiza (tiene o tuvo pero no los devuelve), no hace nunca una autocrítica (es más factible que orine un elefante a que haga un mea culpa), odia a los gorilas, le han sacado fotos junto al gorila Maguila, su periodista favorita es Rosario Lufrano y en su almacén no hay inflación, ¿y todas esas suposiciones porque toca el timbre?, claaro... porque si golpeara la puerta sería un golpista.

Que para llegar...

Que para llegar a tu pecho les pedí a tus ex amantes
Que me den un mapa para encontrarle,
A tu lado izquierdo un corazón,
Para tus amores una razón y
Para mi bolsillo plata, para comprarme una canción.

Como para un gordo su comida favorita,
Que para las putas con velas una cita,
Que por ti una verdad sea escrita,
Que la única boca de dama
Que mis labios toca
Son las masita'.

Que ya no entiendo al mundo
¿Por qué los sentimientos no salen con un estornudo?
Que para no pensar, dudo,
¿Seré un boludo?
Deje el gimnasio,
Ya no quiero ser morrudo
Que dejemos de lastimar con cremas, los cueros cabelludos.
Y a menudo
Pienso en algún cornudo
Que juegan con el
Como dos chicos matic-ludo
Pero en fin, perdón por las malas palabras
Pensamos que soy argentino y no soy sordo-mudo

Hay querido!
Realmente para el hoy no soy un buen marido.
Lávame el auto, que quede bien pulido,
Yo ya me voy,
Desolado estoy
Y sin haber comido.
Me gustaría no enamorarme y
Ser con los amores, un bandido.
Igual! me han enseñado
y por fin eh aprendido

Que estoy para atrás,
No encuentro un mago que con un abra cadabras
Me saque en andas
De este lugar de quebradas compañías.
Yo no pude esquivar las patadas
Caí al piso, me quede con rodillas raspadas.
Y en el truco, la carta amiga de mía mano es el ancho de espadas
Mal en amores, mejor te salen las jugadas.


Que querer no es correr
Contra el tiempo que hace de ti
Lo que quiere hacer.
De mí, un vagabundo viendo caer
Gotas de agua, a las cuales todas juntas
Se lo llama "llover".
Y en una repisa quise poner
Una foto de mi brother,
Se rompió, al jugar contra los años,
Y los años y el tiempo, que no esperan,
A la madera han de comer.
Y así se vio romper, ya sin poder
Retroceder.

En 1769 el párroco Miguel Mateo Bayón sufre un estigma en sus dos muñecas, sus eternos detractores lo acusaron de que se había querido suicidar con la punta de un cucurucho dulce, y que la sangre no era tal sino que se trataba de helado de frutilla, años más tarde fue canonizado y retractadas dichas acusaciones, desde entonces los niños le rezan a San Bayón para que sus padres le compren helados.

Nuevo pais

Esto blog es dedicado pura y exclusibamente a los señores LE PIPE y LEONOR proveedores de mis ideas, fotos y de media sangre que habita en mi haber.